- El barbero dijo: Yo no creo que Dios exista, como usted dice.
- Por que dice usted eso? - preguntó el cliente..
- Es muy fácil... al salir a la calle se da cuenta de que Dios no existe. O... dígame, acaso si Dios existiera, ¿habrían tantos enfermos? ¿Habrían niños abandonados? Si Dios existiera, no habría sufrimiento ni tanto dolor para la humanidad. No puedo pensar que exista un Dios que permita todas estas cosas..
El cliente se quedo pensando, y no quiso responder para evitar una discusión. Al terminar de cortarse el cabello, el cliente salió del negocio y vió a un hombre con la barba y el cabello largo. Entró de nuevo a la barbería y le dijo al barbero.
- Sabe una cosa? Los barberos no existen.
- ¿Cómo? Siiii... aquí estoy Yo.
- No...! dijo el cliente, no existen, si existieran no habría personas con el pelo y la barba tan larga como la de ese hombre.
- Los barberos si existen, es que esas personas no vienen hacia mí..
Si eres de aquellas personas que NO creen en Dios, te invito a reconsiderar tu posición. Ya dejémosle de echar la cual a Dios de nuestras desgracias, dejemos de quejarnos ante El y presentarnos solo con nuestras vanidades.
Volvamonos a Dios, acerquémonos a El, ya no es tiempo de vivir renegando por nuestros problemas. Dios no tiene la culpa de nuestras desgracias, SOMOS NOSOTROS los culpables de lo que nos pasa.
Dios nos dejó con libre albedrío para elegir entre Dios y el pecado. Cada quién somos responsables de nuestra eternidad.
¡Si Dios no existe, demuestrenlo!