Apocalipsis 12:10 Entonces oí una gran voz en el cielo, que decía: Ahora ha venido la salvación, el poder, y el reino de nuestro Dios, y la autoridad de su Cristo; porque ha sido lanzado fuera el acusador de nuestros hermanos, el que los acusaba delante de nuestro Dios día y noche. Job 1:6 Un día vinieron a presentarse delante de Jehová los hijos de Dios, entre los cuales vino también Satanás. 1:7 Y dijo Jehová a Satanás: ¿De dónde vienes? Respondiendo Satanás a Jehová, dijo: De rodear la tierra y de andar por ella. 1:8 Y Jehová dijo a Satanás: ¿No has considerado a mi siervo Job, que no hay otro como él en la tierra, varón perfecto y recto, temeroso de Dios y apartado del mal? 1:9 Respondiendo Satanás a Jehová, dijo: ¿Acaso teme Job a Dios de balde? 1:10 ¿No le has cercado alrededor a él y a su casa y a todo lo que tiene? Al trabajo de sus manos has dado bendición; por tanto, sus bienes han aumentado sobre la tierra. 1:11 Pero extiende ahora tu mano y toca todo lo que tiene, y verás si no blasfema contra ti en tu misma presencia. 1:12 Dijo Jehová a Satanás: He aquí, todo lo que tiene está en tu mano; solamente no pongas tu mano sobre él. Y salió Satanás de delante de Jehová.
En esta ocasión quiero enfocar el propósito de esta reflexión para aquellas personas que han cometido alguna falta grande, o que han reincidido en algun pecado moral y que se sienten totalmente sin perdón y con una carga en sus vidas.
El problema del ser humano es que a pesar de que somos seres imperfectos y cometemos errores, no hacemos nada para intentar remediar nuestra situación. SI has puesto atención a los últimos post publicados, me interesa más que todo ayudar a forjar nuestra relación personal con Dios más que otras cosas.
Soy joven e inexperto en muchas cuestiones de la vida, pero hablo con autoridad acerca de este tema, pues esto lo he experimentado en mi vida. Hoy voy a hablar de la ACUSACIÓN DEL DIABLO PARA CON LOS HIJOS DE DIOS.
Satanás es el acusador más grande de todos los tiempos. Si notas en Job capítulo 1 y 2 el tono en el que el habla con Jehová es un tono acusador, tal como el del fiscal con el juez. Por si no lo sabías, el fiscal es aquella persona que en un juicio es la que se encarga de ACUSAR al sospechoso de o de los delitos que se le imputan. Es el que dice "protesto señor juez", para poder traer acusaciones a la luz y así llevar a que el jurado dictamine una sentencia acusatoria para con el acusado.
Satanás es el acusador de los cristianos. Cuando nosotros vamos en la lucha de la vida y nos tropezamos (con o sin intención de hacerlo), el se presta inmediatamente para señalarnos y acusarnos.
Somos cristianos y cometemos errores pues somos seres humanos, pero a la vez que fallamos nos levantamos inmediatamente porque Dios nos sostiene y cuando caemos El nos levanta y nos perdona si reconocemos nuestro pecado y le pedimos perdón. El problema es que muchos hemos asimilado estas palabras por encima, y no las hemos hecho RHEMA en el corazón. Rhema es "Palabra Viva".
Es normal que nos sintamos mal por pecar, pues el cristiano que ha nacido de nuevo siente dolor por haber ofendido a Dios con sus actos y no quiere hacerlo más. Pero a pesar de pedir perdón de corazón a Dios, teniendo la seguridad de que El puede perdonarnos, satanás no se quedará con los brazos cruzados e intentará por muchos medios hacernos creer que no hemos sido perdonados.
Otros piensan también que las cosas les salen mal por haber pecado. SI es cierto que pagaremos las consecuencias de nuestros actos, pero no es un factor determinante que todos nos sale mal por haber pecado, aunque repito que muchas veces puede que así sea.
Pero hoy quiero decirte: si has sentido acusación en tu corazón, a pesar de que si hayas pecado, dejame decirte algo que fue dicho hace mucho años por los divinos labios de Jesús mismo: "EL QUE A MI VIENE YO NO LE HECHO FUERA".
Sea cierto que pecaras o nó, y no importando que pecado sea, te invito a volver a los brazos de TU Amado. El no te ha negado las puertas y aún tiene misericordia y perdón suficientes para ti.
Sé que has llorado muchas veces en la noche. Durante el día te afecta la culpa, pero cuando estás solo quisieras que alguien te abrazará y te dijera: TE AMO. Quisieras sentirte protegido y amado/a, y que el dolor pasara. Quisieras jamás haber pecado y obtener el perdón de Dios.
Si te sientes culpable, no te rindas. Dios aún te extiende la Mano para levantarte. El quiere hacer de ti, seas hombre o mujer, alguien grande para Su Reino. Tu naciste para ser un/a cristiano firme en los caminos de Dios, y así estar un Día con El.
NO dejes que la culpa te domine. Satanás vencido está en el Nombre de Jesús, y ninguna potestad tiene sobre tí. Si Cristo es tu Salvador y te ha lavado con Su sangre, no hay pecado que el diablo pueda sacarte en cara.