¿Y porqué hago lo que hago?

2º Cor. 5:14 Porque el amor de Cristo nos constriñe, pensando esto: que si uno murió por todos, luego todos murieron; 5:15 y por todos murió, para que los que viven, ya no vivan para sí, sino para aquel que murió y resucitó por ellos.

A lo largo de este año he escrito por la misericordia de Dios consejos que espero hayan sido de bendición para tu vida. Espero poder haber llegado hasta tu corazón a través de la Palabra de Dios y espero que El haya hecho cosas hermosas en tu vida en este año que termina.

Pero te quiero confesar algo: yo también he necesitado a lo largo de este año alguna palabra de Dios para mi vida. Han habido momentos en los cuales mi fé se ha visto desfallecer y aparentemente he querido renunciar al Camino que Dios ha trazado. Pero agradezco a Dios que jamás me ha abandonado y hasta este día El ha sido fiel y Su Mano me ha ayudado a llegar hasta este día.

Y de ello te quiero hablar. Si estoy perseverando aún, no es porque yo sea el gran tipo, o porque sea súper espiritual. No es por mi capacidad ni por mi inteligencia. Eso es basura. Si estoy vivo hasta acá es por la Misericordia de Dios.

Por fé se que mi familia, mis hermanos, mis compañeros y todos uds. que han puesto una pequeña palabra de oración por mi vida serán bendecidos y Dios les colmará de ricas y abundantes bendiciones.

Bueno, ¿qué tiene que ver esto con el tema? Pues bien, ¿por qué hago lo que hago? ¿Cuál es mi motivación? ¿Por qué sigo buscando a Dios? ¿Qué me motiva a orar aún cuando no quiero? ¿Qué es lo que me lleva a escribir en un blog palabras de esperanza para un mundo perdido y sin Dios? ¿Qué es lo que me dice cada día: debes de hacer esto o aquello?

Pues bien, el texto que tomamos de base da la respuesta. El amor de Cristo me CONSTRIÑE. Esa palabra significa: ceñido, aferrado, obligado. El Amor de Dios es el motor que motiva a todo cristiano a seguir adelante. Por nuestras fuerzas o por nuestra voluntad, hace tiempo hubieramos renunciado.

¿No es cierto que a lo largo de este año han salido buenas "ofertas" del mundo y el diablo para que nos apartemos de Dios? ¿Cuántas veces te sentistes derrotado y sin deseos de seguir?

Hermano/a, es hora de que reconozcas que El Amor de Dios es la fuente que te da aliento para continuar. Nadie ha estado contigo en los momentos difíciles salvo el Señor. EL te conoce y por Su Amor no te ha soltado.

Si has llegado hasta este día perseverando, siguiendo en los Caminos del Señor pregúntate, ¿por qué lo he hecho? Y verás que tu respuesta será esta:

DIOS ES LA FUENTE DE MI VIDA Y EL ANHELO DE MI ALMA. SIN EL NO ESTIVIERA AQUÍ. SU AMOR ME MOTIVA CADA DÍA A SEGUIR ADELANTE Y NO ME SOLTARÁ HASTA QUE HAGA EN MÍ SU VOLUNTAD.

Dios te bendiga... El te ama con amor eterno.