¿Qué quieres que sea de tu vida?

Isaías 55:8 Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová. 55:9 Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos.

Muchos de nosotros nos preocupamos por el futuro: ¿Qué seremos cuando seamos mayores? ¿Qué carrera escogeremos? ¿Con quién me voy a casar? ¿Qué trabajo llegaré a tener? ¿ Cómo será mi nueva casa? Y un sin número de preocupaciones que como jóvenes tenemos.

Pero son muy pocos los que se preocupan de su vida espiritual: ¿Cómo puedo vivir en santidad? ¿Cómo renuncio al pecado? ¿Qué debo hacer para agradar a Dios? ¿Estoy viviendo en Su Voluntad o en la mía?

Existen miles de personas que decimos ser cristianas, pero muy pocas lo demostramos. Nos preocupamos por tantas cosas que nos descuidamos de Dios. Pero este es un buen momento en el que reflexionemos y pensemos, ¿qué deseamos que sea de nuestra vida?

Todos tenemos sueños, metas y aspiraciones que deseamos alcanzar. Y no es malo desear llegar a ser alguien en la vida, pero por sobre todas las cosas nos deberíamos de preocupar en alcanzar metas y logros espirituales, crecer en el conocimiento y poder de Dios en nuestras vidas.

Y la realidad de las cosas es que lo espiritual es lo más importante en la vida. Dios desea que estemos cerca de El y que anhelemos las cosas espirituales, pero repito, muchas personas (incluyéndome) le dan más prioridad a las cosas materiales y se olvidan de Dios.

Más este es un momento de reflexión, en el cual le des un giro de 180º a tu vida espiritual. Si eres de aquellos que se olvidan de Dios, este es tu momento de cambiar. El está dispuesto a ayudarte, solamente desea tu disposición.

Es hora de tomar nuestras vidas y rendirlas al Maestro. Es momento de desear cosas mejores, si es cierto que necesitamos cosas materiales, pero cuando Dios llena una vida, no hay placer que se pueda comparar a ello.